Un asteroide es un cuerpo rocoso, carbonáceo o metálico más pequeño
que un planeta y que orbita alrededor del Sol, en una órbita interior a
la de Neptuno. Desde la Tierra tienen aspecto de estrellas, de ahí el
nombre de asteroides (ἀστεροειδής
en griego significa "de figura de estrella") que les fue dado
por John Herschel poco después de que los primeros fueran descubiertos.
Los asteroides también se llaman planetoides o planetas menores,
denominaciones que son más adecuadas a lo que, en realidad, son. Estas últimas
denominaciones incluyen, además, a los cuerpos de hielo, en vez de
rocosos, y a aquellos cuya órbita se encuentra más allá de la de
Neptuno.
La mayoría de los asteroides que se hallan en
nuestro Sistema Solar, poseen órbitas semi-estables entre Marte y Júpiter,
pero algunos son desviados a órbitas que cruzan las de los planetas
mayores.
El 1 de enero de 1801 el astrónomo siciliano
Giuseppe Piazzi, descubrió el asteroide o planeta menor, (1) Ceres,
mientras trabajaba en un catálogo de estrellas. Este planeta menor fue
denominado Ceres Ferdinandea en honor del entonces rey de las Dos
Sicilias, Fernando I.
Al descubrimiento de Piazzi le siguieron otros
parecidos pero de objetos más pequeños. Hoy estimamos que existen cerca
de 2 millones de asteroides con un diámetro mayor que 1 km tan sólo en
el Cinturón Principal de asteroides; sin embargo, si se suman todas sus
masas, el total es el 5% de la masa de la luna.
Desde la redefinición de planeta de 2006 llevada a
cabo por la Unión Astronómica Internacional, el término clásico
asteroide no desaparece, pero se ve englobado dentro de los denominados
cuerpos menores del Sistema Solar (excepto (1) Ceres, que se considera
planeta enano), junto con los cometas, la mayoría de los objetos
transneptunianos y cualquier otro sólido que orbite en torno al Sol y sea
más pequeño que un planeta enano.
Cinturón
de asteroides
La mayor parte de los asteroides conocidos giran en el espacio en una
agrupación que se conoce con el nombre de Cinturón de asteroides, que se
encuentra entre Marte y Júpiter. Este cinturón está a una distancia del
Sol comprendida entre 2 y 3,5 UA. Estos asteroides giran alrededor del Sol
en órbitas de entre 3 y 6 años.
En la tabla de Clasificación de asteroides por Disposición se aprecia
que el cinturón de asteroides se encuentra dividido en tres partes con
distribuciones importantes en 2,39; 2,76 y 3,14 UA. Esto es así debido a
que los asteroides no se distribuyen uniformemente con la distancia al
Sol.
A determinadas distancias que se corresponden con
periodos de revolución que forman una relación sencilla con el periodo
de Júpiter hay una drástica reducción de asteroides, lo que se conoce
como Huecos de Kirkwood y está en estrecha relación con la resonancia
orbital con Júpiter. La causa es la influencia de la marea gravitatoria
de Júpiter repetida periódicamente sobre los asteroides del cinturón,
que les obliga a salir de determinadas relaciones simples de periodo de
revolución.
Hay varias teorías sobre su origen. La más aceptada
estima que se trata de restos del disco protoplanetario que, debido a la
influencia gravitatoria de Júpiter en esta zona, nunca llegaron a formar
un planeta. Otra teoría (propuesta por Heinrich Olbers en el siglo XIX,
pero sin gran aceptación actual) propone un origen relacionado con la
desintegración de un antiguo planeta hace miles de años. El científico
ruso Yevgeny Leonidovich Krinov sugeriría el nombre de Faetón para tal
astro hipotético. En la mitología griega, Faetón[1] era el hijo del
dios Helios, el Sol.Un día, a pesar de las órdenes de su padre, tomó el
carro de Helios, con el que éste recorría el cielo, pero lo condujo tan
imprudentemente que perdió el control, cayendo hacia la Tierra.Para
evitar que provocara una tragedia , los dioses decidieron destruirlo. De
ahí surgió la idea para el nombre de ese teórico décimo planeta.
Cinturón
secundario de asteroides
En la tabla de Clasificación de asteroides por Disposición, la zona
identificada con las siglas AAA (asteroides del tipo Atens-Apollo-Amors),
corresponden con los asteroides identificados como NEA (Near-Earth
Asteroids; asteroides Cercanos a la Tierra). Los NEA, por lo contraio, se
clasifican en:
Asteroides Atón (Atens): asteroides cuyas órbitas se
encuentran contenidas por la órbita de la Tierra.
Asteroides Amor (Amors): asteroides cuyas órbitas se
encuentran contenidas entre las órbitas de la Tierra y Marte, pero más
cercanos a la Tierra.
Asteroides Apolo (Apolos): asteroides que cruzan la
órbita de la Tierra, pudiendo llegar hasta zonas exteriores de la órbita
de Marte.
El 22 de agosto de 2006, (1) Ceres, fue reclasificado como planeta enano
junto con Plutón y Eris.
El asteroide 2004 FH durante su paso cerca de la Tierra, con un diámetro
de 30 m. En su punto más próximo se encontraba a 43.000 km,
aproximadamente 10 veces más próximo que la Luna. La otra luz que se
observa en la imagen es un satélite artificial. Filmación hecha el 18 de
marzo de 2004.
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Asteroides
cercanos a la Tierra (NEOs)
Existe un especial interés en identificar asteroides cuyas órbitas
interseccionan con la órbita de la Tierra. Los tres grupos más
importantes de asteroides cercanos a la Tierra son los asteroides Amor,
los asteroides Apolo y los asteroides Atón.
Asteroides
troyanos
Son un grupo de asteroides que se mueven en la órbita de Júpiter. Están
situados en los dos puntos de Lagrange triangulares a 60 grados por
delante, L4, y por detrás de Júpiter, L5.
También el planeta Marte tiene por lo menos un asteroide troyano, (5261)
Eureka, que ocupa el punto L5 del sistema Sol- Marte.
Igualmente el planeta Neptuno tiene un asteroide troyano, 2001 QR 322
(también denominado 2001 QR322), que es un asteroide descubierto en 2001
y uno de los dos asteroides troyanos conocidos de Neptuno (el otro es 2004
UP10 que orbita delante de Neptuno en su punto lagrangiano L 4). En junio
de 2006 se descubrieron tres nuevos asteroides troyanos de Neptuno.
Asteroides
centauros
Se denominan Asteroides Centauros a los que se encuentran en la parte
exterior del Sistema Solar orbitando entre los grandes planetas. (2060)
Quirón orbita entre Saturno y Urano, (5335) Domocles entre Marte y Urano.
Asteroides
coorbitantes de la Tierra
Son asteroides que al acercarse a la Tierra permanecen capturados por la
gravedad terrestre por algunos años y luego se alejan nuevamente.
Actualmente se conocen dos cuerpos de este tipo: el 2003 YN107 y el 2004
GU9.
Método
de denominación de los asteroides
En principio, cuando un asteroide es descubierto recibe del "Centro
de Planetas Menores" (Minor Planet Center o MPC) un nombre
provisional compuesto de una clave que indica el año, el mes y orden del
descubrimiento. Esta denominación consta de un número, que es el año, y
de dos letras: la primera indicando la quincena en que aconteció el
avistamiento y la segunda reflejando la secuencia dentro de la quincena.
De este modo, 1989 AC, (Tutatis), indica que fue descubierto en la primera
quincena de enero (A) de 1989, y que fue el tercero (C) descubierto en ese
período.
Una vez que la órbita se ha establecido con la
suficiente precisión como para poder predecir su futura trayectoria, se
le asigna un número (no necesariamente el del orden en que fue
descubierto) y, más tarde, un nombre permanente elegido por el
descubridor y aprobado por un comité de la Unión Astronómica
Internacional (International Astronomical Union o IAU). Inicialmente,
todos los nombres con los que se bautizaba a los asteroides eran de
personajes femeninos de la mitología griega y romana pero pronto se optó
por formas más modernas. El primer asteroide que recibió un nombre no
mitológico fue el número 125 de la serie, Liberatrix (liberadora en latín)
que le fue otorgado en honor de Juana de Arco, aunque también se especula
con que tal nombre es un homenaje al primer presidente de la República
Francesa, Adolph Thiers. Por su parte, el primer nombre masculino, lo
recibió el número 433, Eros. Hoy en día, las denominaciones son mucho
menos restringidas y van desde nombres de ciudades y países como
Barcelona (945), Hiroshima (2247), Austria (132), China (1125) y Uganda
(1279) hasta nombres de personas famosas como Zamenhof (1462) o Piazzia
(1000) en honor a Piazzi, personajes de ficción como Mr. Spock (2309) y
otros conceptos como razas, géneros de animales y plantas, etc. Sin
embargo se ha acordado que hay ciertos nombres y temas que están
prohibidos: por ejemplo el de militares, personajes o lugares de la II
Guerra Mundial ya que la referencia a los mismos puede ser molesta o
incluso insultante para los demás. Actualmente con la propuesta del
nombre se acompaña una corta nota que informa a la comunidad
internacional del por qué de dicha denominación: p. ej. "Snoopy:
nombre de un personaje de ficción, concretamente un perro blanco de
orejas colgantes, que acompaña a Charlie Brown y suele reflexionar sobre
el tejado de la caseta en la que vive".
Las efemérides de los asteroides se recogen anualmente
en un volumen titulado "Ephemerides of Minor Planets", que
publica el Institute of Theoretical Astronomy, Russian Academy of
Sciences, Naberezhnaya Kutuzova 10, 191187 St. Petersburg (Russia).
Clasificación
por grupo espectral
Los asteroides pueden ser clasificados por su espectro óptico, que
corresponde a la composición de la superficie de los asteroides, y
teniendo en cuenta también su albedo, en los tipos:
Tipo C: El 75% de los asteroides conocidos, con
albedo menor que 0,04. Son extremadamente oscuros, semejantes a
meteoritos. Parecen contener un elevado porcentaje de carbono.
Tipo D: Este tipo de asteroides tiene un albedo
muy bajo (0,02-0,05). Son muy rojos, en longitudes de onda largas, debido
quizás a la presencia de materiales con gran cantidad de carbono. Son muy
raros en el Cinturón Principal y se les encuentra con mayor frecuencia en
distancias superiores a 3,3 unidades astronómicas del Sol y su período
orbital es la mitad del de Júpiter, es decir están en resonancia 2:1.
Tipo S: Este tipo representa alrededor del 17% de
los asteroides conocidos. Tienen un albedo de 0,14 como promedio y son de
composición metálica, formados fundamentalmente por silicio.
Tipo M: Incluye gran parte del resto de
asteroides. Son asteroides brillantes (albedo 0,10-0,18), casi
exclusivamente formados por níquel y hierro.
Hay otros grupos de asteriodes raros, el número de tipos continúa
creciendo y están siendo estudiados los siguientes:
Tipo T: Se caracterizan por un bajo albedo
(0,04-0,11).
Tipo E
Tipo R
Tipo V: por Vesta.
Curiosidades
de algunos asteroides
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Algunos asteroides tienen satélites a su alrededor como (243) Ida y
su satélite asteroidal Dactyl. El 10 de agosto de 2005 se anunció el
descubrimiento de un asteroide (87) Silvia que tiene dos satélites
girando a su alrededor, Rómulo y Remo. Rómulo, la primera luna, se
descubrió el 18 de febrero de 2001 en el telescopio W. M. Keck II de
10 metros en Mauna Kea, tiene 18 km de diámetro y su órbita, a una
distancia de 1370 km de Silvia, tarda en completarse 87,6 horas. Remo,
la segunda luna, tiene 7 km de diámetro y gira a una distancia de 710
km, tardando 33 horas en completar una órbita alrededor de Silvia.
Riesgo
de impacto con la Tierra
Los Asteroides Cercanos a la Tierra ("Near Earth Asteroids",
NEAs) se dividen en tres categorías: Atenas, Apolos y Amores, siguiendo
el nombre de cada prototipo (Atón, Apolo y Amor). Bajo ciertas
condiciones sería posible un impacto con nuestro Planeta. Si además
consideramos a los cometas, generalmente menos masivos pero igualmente con
gran poder destructor, tenemos a los NEOs o "Near Earth
Objects".
Actualmente existen unos 4.000 objetos catalogados como
NEOs, según NeoDys "Near Earth Objects - Dynamic Site", un
proyecto de la Universidad de Pisa que proporciona información
actualizada de este tipo de astros. Finalmente, si un NEA se aproxima a
menos de 0,05 Unidades Astronómicas (7 millones y medio de kilómetros) a
la Tierra, se le denomina PHA (asteroide potencialmente peligroso, por sus
siglas en inglés). De ellos hay clasificados unos 800 en la actualidad, y
son los que representan un peligro para la civilización si en verdad
alguno llegara a chocar contra el Planeta ya que afectaría de manera
global al mismo. Sin embargo, los cálculos de las trayectorias y de cada
aproximación a la Tierra tienen grandes incertidumbres, debido a que los
elementos orbitales (semiejes mayor y menor, distancia mínima al Sol,
excentricidad, entre otros) no se conocen con total precisión, de manera
que cualquier predicción está sujeta a un margen de error apreciable.
De hecho, el PHA que durante los pasados años ha
representado el mayor peligro, denominado 1950 DA, ya no se clasifica como
tal y dejó recientemente de ser un PHA. Hasta hace poco se pensaba que
existía cierta posibilidad de que impactara contra nuestro Planeta en
2880; sin embargo, el refinamiento de los elementos orbitales ha permitido
que nos demos cuenta de que tal evento no ocurrirá. Otros PHAs conocidos
poseen probabilidades muy bajas de llegar a chocar con el Planeta. De
hecho ninguno está por encima del umbral de ruido (esto es, la
posibilidad no es significativa). Lo que no quiere decir que en cualquier
momento un cálculo más preciso de la trayectoria de uno de ellos, lo
cual requiere observaciones precisas y continuadas, o el descubrimiento de
un nuevo PHA, indique que el impacto llegue a ocurrir. De ahí la
importancia de los grandes proyectos que coordinen observaciones sistemáticas
del cielo y el mantenimiento de bases de datos actualizadas.
En España existe un centro dedicado casi
exclusivamente a este tema que está ubicado en el Observatorio astronómico
de La Sagra, situado en plena montaña (a una altura de 1580 m) cerca de
Puebla de Don Fadrique , en la provincia de Granada, miembro de la
asociación internacional Spaceward.
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